Cómo tratar con los pasotas

Ser un pasota e ir por libre, cuando se tiene una meta que alcanzar, casi nunca pone las cosas más fáciles, Frank Tyger.

Soy un personaje feliz y despreocupado. No soy tan miserable. Pero nunca voy a dejar que nadie entre en mi mundo, Noel Gallagher.

El pasota y súper guay es un espíritu libre y va por libre. Son felices, amigables, se preocupan muy poco por todo y no se enfadan ni se entusiasman con facilidad. No se implica o compromete en ningún proyecto al cien por cien, mucho menos presentarse voluntario. Pueden ser perezosos, no les gusta demasiado trabajar, tienen tendencia a posponer las cosas y simplemente hacen lo que se supone que deben hacer y nada más.

Nunca tienen prisa, viven el presente, se enfocan en lo positivo y valoran su tiempo. Son tranquilos, relajados, pacientes y muy flexibles. No trabajan demasiado, no hacen una hora de más ni muertos y no les importa mucho su profesión, empresa, el jefe, los clientes o, incluso, su carrera profesional o académica. Tienden a mantener un enfoque informal, alegre y despreocupado de la vida.

Sabemos que somos más creativos cuando estamos relajados. Además, el estrés y la ansiedad pueden generar trastornos del sueño e, incluso, agravar los problemas existentes. El estrés incide muy negativamente en la salud en general, en el rendimiento a largo plazo y puede destruir un equipo de trabajo. Por otro lado, algunos pasotas y súper guays están decididos a invertir el menor esfuerzo posible para hacer las cosas. Por lo general, no están lo suficientemente motivados ni comprometidos con su trabajo, se dejan llevar del carro y muestran una total falta de iniciativa e interés. Exhiben una apatía e indiferencia generalizada hacia todo lo que sucede a su alrededor y, como consecuencia, no hacen que las cosas cambien o sucedan.  

¿Qué puedes hacer al respecto?

1. Como siempre, necesitas aceptarlos tal como son. No los vas a cambiar.
2. Tiene un lado bueno y positivo. Ser súper guay y un poco pasota suele implicar ser una persona alegre, optimista y despreocupada. Es agradable estar cerca de ellos. Disfrutan de la vida, viven el momento presente y no se preocupan por el futuro. Ser despreocupado fortalece tu sistema inmunológico.
3. Sin embargo, si estamos hablando de pasotas caraduras y holgazanes que solo están interesados ​​​​en jugar a videojuegos, pasar el rato, perder el tiempo o comprar en línea, puedes intentar mostrarles lo que están haciendo sus compañeros y las consecuencias de sus acciones, reducir sus equipos, fortalecer las relaciones entre los compañeros de trabajo y asignarles responsabilidades, tareas y roles únicos y específicos, de modo que su trabajo sea claramente visible, cuantificable y evaluable.
4. Además, fomenta la autonomía, se paciente, anima a tus empleados a crecer, ofrece refuerzos positivos y comentarios constructivos, mantén el espacio, ambiente y el entorno de trabajo fresco, limpio y cómodo, actualiza la tecnología de la compañía y trata de mejorar la comunicación en general.
5. Si están agotados o quemados, intenta buscar estrategias que fomenten el crecimiento personal, el compromiso y la motivación como, por ejemplo, hacer que sus tareas sean más significativas y desafiantes, proveerles de más formación o recursos, permitirles el cambio de proyecto o equipo, ofrecerles una trayectoria de desarrollo profesional, definir claramente el propósito de su trabajo, etc.
6. Finalmente y como último recurso, debe hacerles saber que estás monitorizando su desempeño y productividad regularmente y que estás dispuesto a recompensar los resultados o ayudarles a crecer profesionalmente en algún otro lugar fuera de la empresa.
7. A veces, se necesita identificar y trabajar problemas subyacentes, como depresión, baja autoestima, abuso de drogas, salud, problemas familiares (divorcio, abuso infantil, violencia doméstica) y es posible que sea recomendable buscar la ayuda de un profesional de la salud mental, como un psicólogo, psiquiatra, etc.